9, abr, 2014 - 15:30
Por Rubén Lasagno
La Cámpora en nuestra provincia no logra amalgamarse bajo un mismo discurso y tras una misma lógica política.
Las encuestas no le dan a ninguno de los posibles precandidatos y ese fue el motivo de la movida para traer a Uribarri, de Entre Ríos. Teléfonos cortados, impresentables que los pasan “al leprosario” y pujas por ver quién se queda en la línea de largada para el 2015, hace que se maten a codazos en la Legislatura y operen internamente para desnudar sus peores perfiles.
Desde que terminaron las elecciones de octubre 2013, OPI viene monitoreando la trama intrincada de la interna que tiene La Cámpora en Santa Cruz, espacio donde la política no le es totalmente favorable a esta facción que dice liderar Máximo Kirchner, quien, más que un dirigente, es un “presta-apellido” como lo mencionan desde de la Legislatura provincial, algunos integrantes de esta ala renovadora del FPVS.
En la Cámara de Diputados de la provincia, quien actualmente ha tomado las riendas de la agrupación, el que define todo y hace a la vez de “presidente” del Bloque, es el diputado Leonardo Álvarez, un sanjulianense que tiene intereses en la minería y un aliado incondicional de las empresas, para quien no dudó en hacer lobby, en oportunidad en que el gobernador pretendía instalar un impuesto inmobiliario a los proyectos que explotan la provincia.
Quien ostentaba el cargo de “Presidente” hasta hace poco, era el diputado Rubén Contreras, un caletense que fue espada de Peralta y luego de 2011, migró a las filas camporistas, pero que no es visto por los integrantes de esta ala renovadora, como alguien forjado en las huestes de Máximo, sino, que es producto de un PJ reacondicionado, el cual, por razones estrictamente políticas partidarias y de oportunidad, ante el desgaste del gobierno provincial, eligió ponerse del lado de la presidenta, creyendo que el actual gobernador de la provincia iba a ser desplazado.
Pero en realidad, Contreras carga con la responsabilidad de haber hecho declaraciones anti políticas siendo presidente del Pj en la Cámara, con respecto a la necesidad de prostibular la provincia, para “calmar la necesidad de los hombres que lleguen a trabajar en las represas” (SIC), algo que significó una bomba neutrónica en medio del Bloque, toda vez que uno de los ejes donde pretende girar la política del FPV en la actualidad, es la de los derechos humanos y la trata de personas.
Fuentes cercanas al diputado, indican que el caletense aún no se ha podido reponer de los duros golpes que recibió (de afuera y de adentro) por el calibre de sus declaraciones, lo cual le valió estar en “el leprosario de la Cámara” lo cual también le ha costado ser marginado de muchas decisiones políticas, al punto, que periodistas de medios locales, confirmaron a esta Agencia que Contreras habría pagado para lograr que le hagan notas.
Otro de los que está estigmatizado dentro de La Cámpora, es el diputado Matías Bezi; uno de sus peores defectos – apuntan – sería la soberbia que muestra, haciendo hincapié en la llegada que en algún momento tuvo con Máximo Kirchner, de quien es amigo y del cual fue una suerte de “confidente” de todo lo que ha pasado y pasa en la capital política de la provincia, ahora devaluado y enfrentando el enojo del hijo presidencial, a quien si bien no se le conoce la voz, le han ecargado manejar la tropa deshilachada de Santa Cruz.
Un infidente parlamentario dijo puntualmente “A Matías lo tienen colgado porque algunos dicen que ya los tiene podrido, que no se le cae una idea, solo copia y pega y trata de coparle los lugares que son propios de Mauricio (Gómez), que está colocando su propia gente, aunque ya sabemos que Bezi y Bull nunca se llevaron bien”.
Tal como refieren las fuentes, estos desaciertos, las peleas y la conducta de Bezi, hizo que el propio Máximo decidiera excluirlo de “responsabilidades mayores” como las que le confirió en el 2011, pero lo que levantó más polvareda en la interna camporista se suscitó al hacerse público que Matías Bezi es el jefe de campaña de Pablo González, el senador que quiere perfilarse como una opción para el próximo año.
De acuerdo a lo que se pudo establecer, los diputados Alexis Quintana, Rubén Contreras, Darío Galván, Claudia Martínez y Stella Maris García, son quienes responden a Bezi dentro del Bloque, en cambio detrás del diputado Leonardo Álvarez, se encolumnan: Oscar Sandoval, Federico Boldovic, Servando Paez y Atanasio Pérez Ozuna.
En esta división, quedan bien visibles los dos bandos que componen La Cámpora de cara a la carrera a las urnas. Una línea claramente identificada por Pablo González y otra, con el Intendente de El Calafate, Javier Belloni, quien está haciendo todo tipo de mérito para llegar lo menos magullado posible a la campaña 2015, aunque es cierto que el camino es largo y las piedras con las que va a tropezar (y que le van a poner) no son pocas.
En este marco, Mauricio Gómez, quien hasta ayer era blanco de los dardos envenenados del Intendente de la villa, está alejado del centro de gravedad de la política provincial, vacacionando en Buenos Aires donde fue becado gracias a la Ley de Lemas y de quien no se sabe que, hasta el momento, haya descollado representando a Santa Cruz como diputado nacional. Las últimas peleas que tuvo con Belloni, disputándose espacios de poder y luego de aquellas pancartas que aparecieron días previos a las elecciones de octubre, lo sacaron de escena y en su lugar, solo Bezi quedó haciéndole frente a la interna partidaria que se desató.
En el pago chico, en tanto, las encuestas no le son favorables a Pablo González y precisamente, dentro de esta suerte de sostenimiento de la alicaída imagen del senador que no mueve la aguja en las preferencias sociales, buscaron traer a la ciudad de Río Gallegos al Gobernador de Entre Ríos, Juan Manuel Urtubey, quien arribó a Río Gallegos con el fin poner al tope el relato K, organizando en la UTN (que es decir kirchnerismo militante) algunas charlas sobre “pensamiento crítico”, algo realmente paradógico, proviniendo de un gobierno que hace del consenso una práctica demodé y de la discusión política un monólogo insufrible y finalmente cumplir con el rito sagrado de darse una vuelta por el mausoleo, en el cementerio local.
“La intención de apuntalar a Pablo (González) gozan de tanto éxito como los que tiene Urtubey de llegar a la presidencia: ninguna”, dijo nuestra fuente, con una mirada que él denominó “objetiva”, en relación a la situación política de la provincia. En tanto, Belloni eligió al presidente del HCD de esta capital, Pablo Grasso, para hacer pública las coincidencias, de cara a la próxima fórmula de gobierno, lo cual puso nervioso a muchos que no aceptan el armado de fórmulas por decisión propia.
En tanto, muchos compañeros de correrías de Mauricio Gómez, se quejan de que éste no les atiende ni siquiera el teléfono y los ha dejado solos peleando con Bezi, que a diferencia del flamante diputado nacional, tiene estructura y poder para ningunearlos haciendo más trabajosa la convivencia dentro del Bloque.
(Agencia OPI Santa Cruz)
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