26, feb, 2014 - 17:15
Hablamos con el cura párroco de Caleta Olivia, Néstor Zubeldia, con respecto a declaraciones que hizo sobre su persona el Intendente de esa ciudad, José Córdoba, quien, entre otras cosas, dijo que alimentaba el odio en la gente e incentivaba el piquete en la ruta. El cura dio su punto de vista y a su vez, reconoció que recibió llamados tendientes a lograr que baje la tensión del conflicto y buscando, particularmente, que deshaga el piquete que desde 8 días permanece cortando la ruta nacional Nº 3.
En relación con las acusaciones disparadas por el Intendente de Caleta Olivia, José Córdoba, catalogándolo al cura párroco de “alimentar el odio” e “incentivar el conflicto”, el sacerdote Néstor Saldivia le refirió a OPI que se enteró de las declaraciones del intendente, estando en una reunión con la ONg. “S.O.S Agua” y dijo no haber escuchado en ese momento al intendente, hasta poco tiempo después que le expresaron lo que dijo.
Al respecto, el cura dijo estar totalmente de acuerdo con Córdoba de que él es parte de la Iglesia (así lo había referido en Intendente) y que alimentar el odio no es el camino; “en eso estoy completamente de acuerdo con el Intendente – manifestó – pero, lamentablemente nadie del municipio (y menos él) estuvo presente en las más variadas reuniones que hicimos con los distintos sectores”, señaló. En cuanto a los agravios personales que el funcionario caletense le disparó, remarcó “no tengo tiempo para esas cosas; no tengo tiempo para discutir cosas que no hacen a la cuestión puntual que es que aquí en Caleta, falta el agua”, reconoció el cura ante nuestro cronista.
También le preguntamos a Zubeldia, si había recibido alguna comunicación telefónica solicitándole que “le baje el tono al conflicto” y particularmente le mencionamos que manejábamos la información de que habría recibido una llamado del padre Lito Álvarez de El Calafate, de Juan Carlos Molina, hoy en el SEDRONAR y del propio Obispo de Río Gallegos, con el fin de solicitarle que colabore en apaciguar las manifestaciones allí en Caleta, especialmente con la gente que corta desde hace varios días la ruta nacional Nº 3.
“Mire, a mí, el primer día del corte, me llamó una persona que yo no conocía que vive aquí en Caleta Olivia y dijo que se llama Parada de apellido, reconoció que llamaba de parte de Alicia Kirchner y me dijo que teníamos una grave problema en la ciudad”, comenzó relatando el sacerdote, “Yo pensé que el grave problema era el corte de agua que veníamos padeciendo, una vez más, desde hace tantos días y después entendí que el “grave problema” era el corte de ruta y por supuesto no lo compartí; no porque no sea un problema un corte de ruta, sino porque eso era originado en la falta de agua, que es un problema verdaderamente grave”.
Pero Zubeldia continuó explicándonos cómo fueron aquellas comunicaciones que recibió y más precisamente cuál había sido el tenor de la conversación que mantuvo con este hombre que se presentó en representación de Alicia Kirchner y su Ministerio “este hombre me pidió ayuda para “desinflar” el corte de ruta; esa es la palabra justa que usó y yo le dije que no contara conmigo para eso, porque no era la causa y que urgentemente había que solucionar las causas del tema del agua. Le dije que a mi modo de ver, esa era la forma de “desinflar” el corte de ruta que me pedía”.
Más adelante el sacerdote explicó “Yo le dije que no contara conmigo para eso, pero en cuanto a reunirnos, a favorecer el diálogo, juntar a las partes, no hay problemas, yo estoy dispuesto a rogarle a quien sea para que nos sentemos a dialogar, porque si bien no comparto el corte de rutas, creo que esto es un último recurso que tiene la gente ante la sordera y la mentira que nos bajan desde el sector político, el cual tendría que estar trabajando para solucionar esto”.
Luego de opinar que en esta oportunidad hay un “abandono de personas” por parte de quienes tienen la obligación de gobernar, se mostró conciliador con el diálogo y se ofreció a facilitarlo, pero también dijo que cuando el Intendente le ofreció ser “mediador”, se negó a desempeñar ese papel “porque yo no soy neutral en esto, estoy del lado de la gente que padece la falta de agua y por lo tanto no puedo “mediar” entre dos partes, cuando mediar es “estar en el medio” y yo estoy con los que reclaman”, señaló.
Retomando la pregunta que le hiciéramos, Zubeldia reconoció que nuestra información era de buena fuente y explicó “al padre Lito Álvarez, a quien conozco desde hace muchos años, me ofreció su colaboración, su ayuda y me dijo que de Río Gallegos le habían pedido que se comunicara conmigo, así lo hemos hecho y estamos en permanente contacto. Creo que ambos sabemos que coincidimos en algunas cosas y en otras no, pero mi aprecio con él está como siempre”.
En cuando al llamado de Carlos Molina dijo “con él no he hablando, tampoco tengo el gusto de conocerlo, solo de vista, pero se por el Sr Obispo que estaba por estos días en Roma y con el Obispo, hablamos desde el primer día de la crisis y desde entonces lo vengo poniendo al tanto” y finalmente sobre el Obispo Daníbale concluyó “me llamó también, para decirme que una funcionaria de Nación lo había llamado para decirle que yo me había negado que dialogáramos en la parroquia, con gente de la ruta y las autoridades y yo le expliqué con lujos de detalles que como pasa en estos casos, era una “media verdad” o “una media mentira”, porque era cierto que yo no estaba de acuerdo con que dialogáramos en la parroquia, pero no porque yo me hubiera opuesto, sino porque la asamblea de la ruta, optó porque no fuera así”.
El padre Zubeldia también señaló que se encuentra a la espera de un mediador enviado desde Nación, que se trata del señor Carlos Montagno, Viceministro del Ministerio de Desarrollo Social “y cuando llegue esta persona – indicó – habrá un diálogo donde los asambleístas exigen la existencia de cámaras de televisión y el periodismo presente”.
Sobre la situación actual y ante los anuncios de que el 85% de la población está recibiendo agua, el párroco aludió “acá creo que más que una falta de agua hay una falta de confianza sobre las autoridades que tanto le han mentido a la gente; por eso ya nadie cree lo que dicen y lo que prometen y creo que básicamente lo que tenemos que restablecer en la población es la confianza, para poder trabajar todos juntos detrás de un mismo objetivo”.
Consideró indispensable la declaración de la Emergencia hídrica en Caleta, pero también hizo hincapié en la necesidad de replantear el tema sanitario y de salud, porque la falta de agua, trae problemas comunes a todos los habitantes. (Agencia OPI Santa Cruz)
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