CARTAS Y NOTAS DE NUESTROS AMIGOS
28/04/2020
UNA REALIDAD A DOS PUNTAS
Dijimos el 30 de septiembre de 2018
VENGANZAS PARALELAS
Zapatero estuvo en el poder siete años y los Kirchner doce años (primero Néstor, después Cristina) Durante ese lapso han desarrollado una política marcada por su ideología de izquierda. En la economía, la política exterior y el estilo de gobernar, entre otros aspectos, se dan numerosos paralelismos entre estos dos gobiernos.
José Luis Rodríguez Zapatero ha hecho de la llamada "Memoria Histórica", el recuerdo de los crímenes cometidos por uno de los dos bandos de la Guerra Civil, una de las banderas de su Gobierno, una visión revanchista de la historia.
Néstor Kirchner impulsó los juicios de lesa humanidad contra los militares que derrotaron al comunismo terrorista de los 70 y 80 e hizo de los derechos humanos su proselitismo político, misma visión revanchista de la historia.. Y desarrolló también una política similar de recuperación de la "memoria histórica".
La similitud persiste actualmente en los movimientos destituyentes en ambos países por los derrotados izquierdistas que no cejan en su empeño de imponer sus falsos relatos con la intención de reabrir heridas y provocar las grietas en la sociedad.
Así lo tenemos a Pablo Iglesias, ex "Indignados" y cofundador del partido "Podemos", hace cuatro años, hoy tercera fuerza política en España, admirador de Hugo Chavez, financiado por él y por Nicolás Maduro a travès del Centro de Estudios Políticos y Sociales, fue investigado al descubrirse un giro de cuatro millones de Euros de Venezuela que no rindió ante su propio partido. Fue el exportador a España de la ideología bolivariana y en sus declaraciones a favor de dicha dictadura, de disfraz democrático, afirmó: “No existe un régimen bolivariano, existe un país bolivariano donde hay elecciones democráticas que se llama Venezuela”, y comparó al expresidente venezolano con Bolívar.
Las propuestas que ha presentado con su partido Podemos se suman a la proposición de ley integral de la memoria democrática y de reconocimiento y reparación de las víctimas del franquismo. En dicha iniciativa, se planteó, entre otras cosas, derribar la gran cruz, monumento de 145 metros que corona el complejo del Valle de los Caídos y sacar del mismo no sólo los restos del dictador Francisco Franco, sino también los del fundador de La Falange, José Antonio Primo de Rivera.
La venganza por la derrota en campos de batalla del comunismo en ambos países, se muestra en forma paralela Y no tardaremos en ver el homenaje a los asesinos y violadores de monjas y sacerdotes, a los incendiarios de templos e iglesias, que se efectuará con el arrojo de flores al Guadalquivir, en su memoria, por mandatarios extanjeros llevados a sus orillas por expresa invitación del gobierno español.
En los dos países la historia se escribe para un solo lado, se olvidan las víctimas del terrorismo y se premian a sus verdugos con prebendas, indemnizaciones, cargos públicos y leyes a su favor, todo en nombre de una venganza sanguinaria ejecutada irónicamente en países democráticos, o así denominados.
Decíamos el 12 de marzo en estas misma columnas:
IMPERDONABLE HEREJÍA
En Europa hay una penetración masiva e inteligente en todas las organizaciones internacionales, en especial en las escuelas de niños, en las marchas en las ciudades que obedecen a propósitos justos y razonables, pero que son aprovechadas para esa infiltración apoyada por el periodismo, tal como lo estamos presenciando en nuestro desorientado y tumultuoso país. Se acentúa esta planificada venganza en los lugares donde el comunismo fue derrotado por las armas, vean los juicios de lesa humanidad que para sorpresa de la gran mayoría se mantienen y crecen en las falsas denuncias.
Vean en España el renacer del odio a Franco y a los que la salvaron del comunismo bolchevique que quemaba iglesias, violaban monjas, se disfrazaban profanando las vestiduras. Hasta se están gestando juicios a los militares franquistas en nombre de los derechos humanos. Ahora el populismo español profana sus tumbas y buscan desalojarlos del Mausoleo, pero no hacen lo mismo con Hitler y Mussolini.
Dijimos el 23 de marzo
LA INVASIÓN DE LA IDEOLOGÍA GRAMSCIANA
Observamos que las pinzas del izquierdismo se van cerrando mediante un plan globalizado que alcanza a todas las instituciones sociales,políticas,culturales,deportivas,
industriales, comerciales, religiosas, seglares y militares, en el orden mundial con el definido propósito de provocar un caos total llevado por la falsa ideología de la liberación.
Lo estamos comprobando con su iniciación en la educación sexual obligatoria a los niños, la aprobación del aborto libre y gratuito, la unión sexual de diferentes sexos, el libre albedrío, la incentivación del feminismo, la modificación de los idiomas buscando hacerlos neutros, la revisión de la historia, la incitación a “desaprender”. “desenseñar”, “desconstruir”, “desamorar”, léxico con el que se desprecian todos los conocimientos adquiridos y las costumbres tradicionales.
Si nos detenemos a tejer en una tela imaginaria los distintos sucesos que se van produciendo con las característas recién enunciadas, nos encontraremos con una telaraña perfectamente diseñada, con diferentes matices, según la cultura e idiosincracia de los países, pero que conducen a la misma finalidad de la teoría de la liberación total.
Hoy recibo la siguiente carta de Madrid, que confirma la razón de mis razones, de tal forma que podía haberla escrito con mi pluma desde la lejana Buenos Aires:
"Silvio, en la España democrática nos encontramos con leyes de vigilancia y control ideológico, que no otra cosa es toda la legislación amparada en la denominación “memoria histórica”.
Cuanto concierne a las muy belicosas leyes de memoria histórica tiene un tufillo de revancha y odio que difícilmente encaja en un sistema democrático, cuya finalidad no son los ajustes de cuentas sino la justicia.
La mejor vacuna contra la memoria histórica es desde luego abolir las leyes que reescriben los hechos acaecidos. Y para ello es necesario que sean los historiadores quienes se encarguen de la Historia, y no los políticos o sus “historiadores” a sueldo.
Las leyes de memoria histórica y la radicalización de la izquierda desde Zapatero solo contribuyen a dividir y lo que es peor, a sembrar la semilla del odio. Un odio que ensombrece hoy la vida política institucional y se contagia a la ciudadanía, porque los políticos han abjurado de una de sus funciones: la pedagogía.
Muy ligado al odio, al ajuste de cuentas revanchista y a la división que rodea a la memoria histórica, aparece una suerte de laicismo que convierte a quienes lo practican en auténticos negacionistas de los derechos civiles.
Leyes como la de memoria histórica, o las leyes de género, toda la legislación izquierdista aprobada desde el período Zapatero a nuestros días, podría desaparecer si los ciudadanos votamos a partidos que se comprometan con su derogación.
Te informaba recientemente del último ejemplo de la represión laicista: Televisión Española ha rechazado la emisión de la extraordinaria película sobre la Semana Santa de Sevilla que dirigiera Manuel Gutiérrez Aragón, argumentando que “no es de interés”.
Silvio, feliz fin de semana. Y que a la vuelta hayamos hecho una España mejor. ¡Y también una Argentina mejor!
¡Si Dios quiere!
Miguel Vidal"
La distancia. el tiempo, la geografía, hasta la cutura nos puede separar, pero estas llamativas coincidencias, son la plena demostración del avance izquierdista en el mundo. ¿No lo queremos ver?
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