01/12 – 16:45
Hay una nota aparecida en el diario inglés The Guardian, donde aborda el tema de las represas a construir en Santa Cruz. La nota en general es una crónica de lo que todos sabemos y no aporta mayores datos de importancia para los que vivimos en la Patagonia, pero un dato que ha sido sesgado intencionalmente todo este tiempo, por el gobierno, por los medios dependientes, por Electroingeniería y abordado, analizado y anunciado por OPI, el medio británico lo confirma: el nacimiento de un nuevo poblado.
En el año 2012 advertimos que si no se tomaban precauciones, si no se hacían estudios preliminares y si no se planificaba convenientemente, se corría el riesgo de generar asentamientos poblacionales alrededor de los obradores de las represas sobre el río Santa Cruz, cuestión que se iba a dar “naturalmente”, como ya ha sucedido en otras obras de este tipo, excepto que se planificara previamente los pasos a seguir, atendiendo que un centro urbano debe enmarcarse en un proyecto a largo plazo, a una política de Estado competente con el ordenamiento territorial, que determine cuándo, dónde y en qué momento se promueve la creación de un pueblo, debido, precisamente a cuestiones de infraestructura, servicios, seguridad y una serie de cuestiones que deben ser concienzudamente analizados y proyectados por el gobierno provincial.
Como todo lo que se hace en Santa Cruz, donde no hay políticas largoplacistas ni proyectos, era obvio que las represas generarán asentamientos que con el tiempo conformarán grupos humanos que tenderán a cubrir sus propias necesidades locales y de esa manera demandarán infraestructura e intervención del Estado.
Cuando lo dijimos y luego lo reiteramos en el 2014, en una nota donde analizábamos los detalles que el gobierno había obviado (como el Estudio de Impacto Ambiental) o callado, como éste que nos ocupa, en una entrevista con Ferreira de Electroingeniería se lo preguntamos y el constructor argentino de la obra, no deslizó ninguna respuesta satisfactoria, al respecto.
Hoy The Guardian dice, citando a Néstor Ayala jefe de la construcción que se está llevando a cabo en el lugar de las represas, “dentro de un año Ayala espera que esta comunidad temporal se convierta en un pequeño pueblo de más de 5.000 personas”, expresa bien claro el diario inglés. Es decir que si el jefe de obras “espera” que ese asentamiento se transforme en un pueblo, es porque de antemano esa posibilidad ha sido conversada, calculada, pero jamás informada a la opinión pública.
Luego The Guardian alude a que el proyecto de las presas “ha provocado la alarma rayana en la xenofobia” dice, alegando al miedo de gran parte de la población, que la llegada de obreros chinos, genere inconvenientes de integración y convivencia.
“En un eco de los prejuicios “peligro amarillo” del pasado, algunos en la Patagonia escasamente poblada temen una afluencia de colonos chinos” remarca el medio y afirma “Estas preocupaciones son infundadas. Sólo 150 ingenieros chinos trabajarán en el proyecto, a menos de 4% de toda la fuerza laboral”, concluye el análisis, sin tener en cuenta o desconocer que el gobierno de CFK extendió (inicialmente) al menos unos 300 permisos de obreros chinos para ingresar al país, lo cual puede dar una dimensión de lo que puede pasar si esta tendencia sigue.
Si bien es cierto que el personal jerárquico y profesional chino ya está en el país, no es menos cierto que debido a los conflictos generados por el personal de la UOCRA en Neuquén, donde los chinos construyen la base de monitoreo espacial y lleva más de un año de retraso por conflictos con los trabajadores, con el tema de las represas, pretenden que no pase lo mismo.
Estas previsiones, como el Estudio de Impacto Ambiental, están lejos de ser cuestiones que se informen públicamente, por parte del gobierno. En unos días más se hará una Audiencia Pública en Cdte Luis Piedra Buena, sin embargo, todo nos remite a la realizada en oportunidad de convocarse a la ciudadanía a Río Turbio para la Audiencia Públicas por la construcción de la Megausina, donde horas previas, los vecinos que iban a hacer uso de la palabra, recibían un instructivo con preguntas a las que debían atenerse. La Audiencia se hizo igual, la usina se comenzó a construir igual y todo sigue igual; excepto, claro, el cumplimiento de las normas y las leyes que obligan a determinar impactos, atenuarlos, prevenirlos y mitigarlos. Como es natural en Santa Cruz y lo dijo el ex vicegobernador Carlos Sancho, “lo importante son las obras, los papeles después vemos”… y así nos va.
(Agencia OPI Santa Cruz)
No hay comentarios:
Publicar un comentario