07/03/2016 - 06:12hs
Detrás de la expeditiva aceptación de UPCN a la oferta salarial más escandalosa de los últimos años, se escondería un oscuro entramado de negociados. El vaciamiento del IOMA y los ñoquis, en la mira
La casi inmediata aceptación de la conducción del gremio UPCN a la polémica oferta salarial que realizó el gobierno bonaerense, que contempla un irrisorio 15% en dos cuotas, siguen dando mucho que hablar.
En realidad, lo ocurrido no hizo más que poner de manifiesto, una vez más, los estrechos vínculos que unen a ciertos dirigentes sindicales con las peores prácticas y los negociados más controvertidos en la Provincia de Buenos Aires.
Desde distintos sectores políticos y gremiales, creen que detrás de la aceptación de UPCN a la propuesta se escondería un pacto de impunidad para evitar que avancen los escándalos de corrupción que involucran, directa a indirectamente, a dirigentes de ese sindicato como Teodoro Carlos Quintana (secretario general), Juan Héctor Nieves (secretario de finanzas), Diego Leonardo Rétola (secretario gremial) y Luis Pérez (secretario administrativo y vocal del directorio del IOMA), entre otros. No por casualidad, durante la paritaria del pasado jueves, Rétola –un dirigente que hasta diciembre ostentaba un cargo de director político en el Instituto Cultural bonaerense, y es considerado ñoqui por los propios trabajadores de esa dependencia- calificó como “histórica” la propuesta del 15%, ante el asombro de sus pares de otros sindicatos. Un día más tarde, el propio Quintana hizo lo mismo.
A su vez, otro elemento que se habría negociado entre gallos y medianoche sería que se mantuvieran los cientos de ñoquis, relacionados con este gremio, que cobra todos los meses –especialmente en la Dirección General de Cultura y Educación- sin cumplir funciones efectivas en ninguna dependencia del Estado.
También está en la mira el vaciamiento que tuvo lugar el IOMA, donde los profesionales de la obra social denuncian que sólo en un periodo de 18 meses –en la última etapa del gobierno sciolista- se pagaron sobreprecios por $2800 millones, lo que le produjo un enorme daño a los afiliados de la obra social que, en su gran mayoría, son docentes, policías y agentes estatales de la Provincia, y padecen las consecuencias de una cobertura médica cada vez más deficiente.
Tal como lo viene informando Hoy, en los tribunales platenses hay por lo menos 15 denuncias penales que involucran a quienes ocuparon lugares en el directorio del IOMA, entre ellos el mencionado Pérez y Osvaldo Romanatti. Este último es un ex dirigente de UPCN que decidió pegar el portazo, haciendo graves denuncias públicas contra Quintana, las cuales llamativamente nunca fueron investigadas por la Justicia. Cabe remarcar que el representante de UPCN, en el directorio, es nombrado a dedo por el secretario general de ese gremio.
“El 15% que avaló UPCN no se condice con ninguna realidad económica y social. Por eso no sería de extrañar que hayan negociado seguir manejando las cajas del IOMA. Nosotros hemos denunciando que gente de Quintana está y estuvo vinculada con las irregularidades en el área de compras y suministros, como así también con las empresas fantasmas vinculadas a las miles de internaciones domiciliarias que se facturan y no se hacen. A esto se le suma, lo que constituye el tema más que sensible como es el área de farmacia, desde donde utilizaban los nombres de afiliados fallecidos e inexistentes para vender clandestinamente drogas oncológicas de alto costo en una red de 15 farmacias de la provincia, recaudado cifras millonarias”, le dijo a Hoy el médico Idelmar Seillant, titular de la Asociación de Profesionales del IOMA.
A partir de estas denuncias, dos ex funcionarios del IOMA, Marcelo Piergiácomi y Sergio Massaccesi, terminaron presos y ahora deberán ir a juicio oral. Ambos están vinculados con UPCN y se desempeñaban como subdirector del área Farmacia y Bioquímica, y como jefe del departamento Auditoría y Fiscalización Farmacéutica. Insólitamente, pese a encontrarse procesados, siguen formando parte de la plantilla de personal de la obra social, siguen cobrando su sueldo como agentes del Estado y los sumarios administrativos fueron cajoneados.
“Todos los jefes de departamento en el IOMA siguen siendo los mismos del gobierno anterior y están vinculados con Quintana. Por eso exigimos que se convoque, cuanto antes, a concursos de antecedentes y oposición para cubrir esos cargos con profesionales idóneos y no implicados en la corrupción”, dijo Seillant.
Lo que ocurre en el IOMA, con las jefaturas departamentales, también sucede en el Instituto Cultural. Por ejemplo, la esposa de Rétola, llamada Sonia Rodríguez, sería jefe del departamento del área de compras, y también habría hecho nombrar con abultados sueldos a varios integrantes de su familia. En definitiva, parafraseando a William Shakespeare: “Algo huele a podrido” en la provincia de Buenos Aires.
“UPCN se está garantizando el desvío de fondos”
“IOMA cuenta con un presupuesto de $ 21.000 millones y se destina al salario el 4,2%. Manteniendo la mayor parte del salario en negro; que no va a la antigüedad ni a la jubilación. Los trabajadores no queremos bonificaciones, queremos salario”, dice una carta pública difundida por la Asociación de Profesionales del IOMA.
“Con la estructura actual, UPCN se está garantizando el desvío de gran parte del presupuesto a la corrupción, lo mismo que se venía sucediendo en todos estos años de la gestión La Scaleia”, alertaron. Y agregaron: “A las nuevas autoridades les decimos (porque no nos han convocado al diálogo, conociendo nuestra lucha luego de 8 años contra la corrupción), que no le tengan miedo a los corruptos. Los empleados honestos de IOMA somos más”.
Negociados que continúan
Es tal el grado de impunidad en el IOMA que una empleada administrativa sin formación profesional llamada Andrea Mendiguibel, que cumplía órdenes de Piergiácomi y también está vinculada con UPCN, ahora lo reemplaza en la subdirección: su designación habría sido impulsada por Antonio La Scaleia, el ex presidente del IOMA que habilitó varios de los negocios a UPCN. Pese al cambio del gobierno aún no fue reemplazada.
Al no haber una comisión científica, Mendiguibel determina qué drogas ingresan al vademécum del IOMA y define discrecionalmente que tipo de cobertura van a tener. A saber: la cobertura es de 100% a cargo del IOMA si forma parte del Plan Meppes (patologías crónicas) o varía si corresponde al plan ambulatorio (el afiliado lo retira directamente de la farmacia y tiene que abonar la diferencia).
Fegeppba: otra vergüenza
A la escandalosa aceptación de UPCN; se le suma la actitud que está adoptado la conducción de la Federación de Gremios Estatales y Particulares de la Provincia (Fegeppba), que estaría analizando la irrisoria propuesta salarial y se está mostrando más que permeable.
“Es atractivo por la incertidumbre de lo que puede pasar con la inflación y nos permite volver a discutir con un panorama más claro en julio”, dijo el titular de la Federación, Jorge Baldovino, dirigente del gremio AERI. Una postura similar tendría el secretario ajunto de la Fegeppba, Miguel Zubieta, del sindicato de Salud Pública.
¿Tendrá algo que ver, en la actitud de Fegeppba, la continuidad del negocio de la distribución de boletas que tiene AERI, a través de lacooperativa El Aldabón, en el ministerio de Economía?
En tanto, según pudo saber Hoy, muchos afiliados de AERI y de Salud Pública se estarían movilizando contra la decisión de la conducción de esos gremios. “No comprendemos como pueden estar analizando esta miseria”, dijeron a nuestro diario.
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