lunes, 8 de febrero de 2016

"Macri y Massa, aliados en 2016, pueden ganar en 2017 y competir en 2019"




Lunes 08 de febrero de 2016


Intelectual nacido en la muy rural Crespo (Entre Ríos), Ceferino Ovidio Ramón Reato es licenciado en Ciencias Politicas, historiador, docente y periodista, aunque la tarea que más tiempo le demanda es lidiar con su amigo santafecino Raúl Acosta, a quien le resulta un desafío ponerlo a prueba con frecuencia ante los micrófonos de LT8 (Rosario) o en tugurios gastronómicos donde se cruzan en horas tardías. Aquí el más reciente intercambio:


Ceferino Reato, quien encuentra luces y sombras en la Administración Macri.

Ceferino Reato, entrevistado por 'el Bigote' Acosta:
-¿Son medidas sueltas las de (Mauricio) Macri, o vos ves algún tipo de plan que nos deje tranquilos en cuanto a que sí, es cierto, hay un plan? ¿O seguimos intranquilos porque son medidas inconexas...? ¿Cómo lo ves?
-Yo creo que depende mucho del área. Macri es un CEO, deja hacer, y todo depende del áreaSi al área le toca un buen ministro con un buen equipo, hay un plan. A mí me parece que afortunadamente en Hacienda, en Finanzas, ahí tiene un buen equipo, gente que él conoce. Es un poco, como diríamos, arrogante, pero bueno, eso está bien. Para mí en ésto es tolerable porque sabe, tiene un área importante, y todo lo que está haciendo lo está haciendo bien desde el punto de vista de una coherencia y una eficiencia técnica, ¿no? Hay un conocimiento. Fijate... hay un plan. En otras áreas me parece menos.
-Yo diría, para aliviarte las quejas, a mí me parece que en Salud no estamos tan bien. Fijate que el mosquito está derrotando al ministro. Y ahora volvemos con la descacharrización... Y la compañera Bullrich tampoco está muy segura, ¿no?
-No... Incluso desde el punto de vista político tampoco estamos muy bien porque no sabemos bien qué hacer con el tema crucial de la minoría parlamentaria. Pensábamos estar dos meses hasta las sesiones sin el Congreso abierto, ahora parece que vamos a cambiar...Tenemos un poquito de suerte con el tema del kirchnerismo, pero me parece previsible, porque no tenía mucha vida. Tenía vida en el imaginario de políticos, del PRO con miedo, de análisis de periodistas, pero se iba a desmembrar, porque la única jugada que tenía Cristina es que el gobierno fracasara rápidamente, pero eso no es posible. Entonces, me parece que ellos empujaban por las urgencias de los líderes territoriales, iban a dar el espectáculo que están dando ahora. Hay una oportunidad para Cambiemos para tratar de hacer un acuerdo parlamentario un poquito más firme, ¿verdad? Porque la otra manera tenía que funcionar con el Congreso cerrado y a puro decretazo, y eso tampoco es posible. En política exterior creo que sí, que hay una canciller, y por lo tanto hay una política exterior. Todavía no está desarrollada en todo su esplendor pero lo están haciendo. Tampoco en Acción Social me parece que tengan, así como Salud y Seguridad, no creo que tengan grandes funcionarios. Educación tampoco pero bueno... era algo que a Macri no le interesaba, ¿no?
-Sobre esto, la pregunta sería: ¿Vamos hacia el fin del idilio o todavía queda?
-No, yo creo que queda idilio. Sorprendentemente para mí la base electoral del PRO está muy firme, soportando en muchos sentidos ser quienes están pagando el costo de la salida del cepo y de la devaluación. Leía en Clarín a uno de los colegas que fue a hablar con Macri el día anterior, y él dice lo siguiente: que Macri les dijo "primero hay que fijarse en mantener los empleos que están, luego en crear otros empleos, y por último pedir un aumento salarial". Eso respecto a los líderes sindicales... y hay que decir eso. Lo más importante es la transcripción literal sin siquiera un comentario de un periodista, porque ¿eso qué quiere decir? Que la devaluación la vamos a pagar los asalariados, ¿verdad? Con varios puntos de pérdida respecto de lo que sacás de la riqueza nacional. Eso es muy difícil de hacer. No creo que lo logre.
-A ver si te entendí: "Eso es un enunciado, pero resolverlo no es cómodo ni es fácil."
-Pero lo importante, lo clave, es decirlo. Que un Presidente tenga una visión tan sesgada de quién tiene que pagar el costo de la fiesta kirchnerista, y además que ahora aparezca preocupado por otra área que anda muy mal, que es el tema de los precios minoristas. Parece muy preocupado por la inflación, pero siempre con una ideología muy liberal, muy abstracta, de llamar a los buenos sentimientos de quienes están remarcando los precios. Decirles "no lo hagan", "no hay que hacerlo", "estamos en recesión", "no se hacen esas cosas", ¿no? También un área que funciona muy mal es este, la Defensa de la Competencia, o la Secretaría de Comercio, que como vos sabés, está en manos de un ultra-liberal que además forma parte de una familia con muchos supermercados en el sur.
-Es un lío eso.
-Es un lío porque son áreas que son muy liberales, peroliberales de gente que ya no existe en ningún lado. Creer que acá hay un mercado con competencia, por ejemplo en la leche, sin darse cuenta que hay dos o tres marcas nada más, entonces el Estado tiene que estar muy activo ahí.
-Es que tendría que ser fácil estar activo con Mastellone y Sancor, ¿no?
-Me parece que sí porque, además, son empresas que necesitan mucho del Estado, y un Estado tiene que estar fijándose, no puede costar lo que cuesta la leche en el mercado y los productores estar recibiendo lo que reciben. Ahí hay un gap, una diferencia que se quedan quienes están en el medio.
-Has vivido en 3 sociedades muy diferentes: Europa (Italia), Brasil (Sao Paulo como base), y Buenos Aires. ¿Cómo estamos con esas sociedades, Ceferino?
-A mí hay algo que me da una expectativa muy positiva que es la base electoral del PRO que tiene ganas de que el gobierno termine y bien, y eso está muy bien, habla de un altruismo de clase media inesperado en muchos casos. Pero nuestra sociedad es poco sofisticada en el fondo, por eso hay cosas que han salido tan bien del cepo, y no podemos controlar el precio de la leche, ¿viste? Nos falta la sofisticación. Nos falta pragmatismo. Los italianos tienen problemas, como todos, pero siempre encontrás una solución porque en el fondo siempre las hay. Lo que pasa es que nosotros tendemos a agarrarnos, aferrarnos, a ideologías, y tenemos al loco de (Guillermo) Moreno queriendo controlar todo, y a Macri con su ingenuidad pensando que son mercados perfectos y que por lo tanto esto de los precios se tiene que acomodar solos. Que el Estado no necesita participar porque sino eso nos lleva a la locura anacrónica de Moreno. En el medio hay vastas opciones, pero nosotros generalmente no vemos el medio. O estamos en un lado o estamos en el otro, y esa es una gran simpleza, falta de sofisticación. Esta es una sociedad muy politizada pero con muy poca cultura política, como decía (Juan) Perón.
-(Risas) Eso es cierto. En este momento estoy recordando que alguien con muchísima formación política como el ministro Pugliese, un ministro del radicalismo, convicto y confeso del radicalismo hasta el caracú, dijo al micrófono en un reportaje: "les hablé con el corazón y me contestaron con el bolsillo". (Risas) Me parece obvio que eso sucediese. Así que inscribamos a Macri en aquella tontera de Pugliese también...
-En ese tema sí, después hay otro tema que le interesa, en esas crónicas de los diarios, de los periodistas económicos que lo visitaron, que estuvieron con él, hay mucho de eso... Como a él le interesan ciertas cosas, ciertas innovaciones, ciertas máquinas, ciertas obras. Esos son los aspectos muy positivos, es un ingeniero muy práctico.Lo que me asusta es eso de que él delega muchas áreas, y si no tiene los funcionarios adecuados, hace aguaPorque yo estoy seguro de si tuviera buenos funcionarios en Secretaría de Comercio, en Defensa de la Competencia, no tendríamos este problema. Él evalúa mucho por resultado, ¿no? Es un gerente de gran empresa.
-Una cuestión poco menos que elemental, pero definitiva en todas estas cosas: estamos viendo los 4 años de Macri, ¿no?
-Yo creo que sí. Creo que, además, si acierta algunas cosas y tiene un buen discurso, puede ganar perfectamente las elecciones legislativas del año próximoy si gana está bien ubicado para el 2019 para repetir. Pero también es cierto que del otro lado, creo que (Sergio) Massa también está muy bien. Tiene una situación muy propicia, ha solucionado el problema de caja que tuvo durante los dos últimos años al controlar la Legislatura de la Provincia de Buenos Aires, y también tiene elecciones el año próximo como todos y la oportunidad de ser candidato a senador por la Provincia de Buenos Aires y ganarlas. Es una persona que está superando el problema que él tenía. Paradójicamente, quien por muchos sectores era visto como muy joven, muy inmaduro y un poquito irresponsable -por lo menos algunos no le tenían confianza- resulta que ahora le están teniendo confianza, y él está teniendo la postura justa... Hay un sector del electorado que quiere que al gobierno le vaya bien, y él ayuda cuando tiene que ayudar y se diferencia cuando quiere, y eso es una gran ventaja, ¿verdad?

No hay comentarios:

Publicar un comentario