Altas expectativas en Francia por la visita de Hollande al país

23/02/16 - 00:24

Relaciones exteriores.


Comparan el viaje con el de De Gaulle en 1964. París apoyará el ingreso argentino a la OCDE y la normalización financiera.

• María Laura Avignolo
• Corresponsal de Clarín en París y Londres

Para Francia, la visita de Estado del presidente Francois Hollande a Buenos Aires desde el miércoles tiene la misma importancia e intensidad que el histórico tour latinoamericano en 1964 del general Charles de Gaulle y su esposa Ivonne. Será simbólica, política y con “una hoja de ruta”, que van a firmar Hollande y el presidente Mauricio Macri en la Casa Rosada, para comprometerse a un “renovado camino de entendimiento económico y financiero reforzado entre ambos países”, que se extenderá al campo científico y cultural, “basado en la excelencia tecnológica y medioambiental”.

Francia apoyará a la Argentina en el deseo de acercarse a la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico(OCDE) y reforzarán la cooperación financiera para la normalización de las relaciones de Argentina con la comunidad internacional, como ya ayudó Francia en el Club de París. La colaboración en los sectores de trenes suburbanos, subtes y los sectores farmacéuticos y de biotecnología van a ser alentadas.

Los tiempos han cambiado desde el general de Gaulle, que pasó tres semanas en la región. Como sus antecesores Francois Mitterrand y Jacques Chirac, la estadía del jefe de Estado francés será breve pero productiva en Argentina. Hollande llegará el miércoles a la tarde a Buenos Aires tras emprender el viaje más largo de su mandato. Estuvo tres días en Tahití –en la Polinesia– para discutir el delicado tema de las compensaciones por los ensayos nucleares franceses, y visitó las islas de Wallis y Futuna, dos territorios remotos. Con un duro “décalage” horario a cuestas, el jefe de Estado francés aterrizará en Lima el 23 febrero para entrevistarse con el presidente Ollanta Humala, y luego iniciar la visita a Buenos Aires durante 24 horas antes de continuar el jueves hacia Uruguay. Así completará su gira latinoamericana antes de la elección presidencial del 2017, que ya había incluido México, Cuba y Brasil.

En Buenos Aires, Hoolande tendrá una agenda tan intensa como apretada y diversa. Después del “ping pong diplomacy” chino -americano, Hollande y Macri van a estrenar otro modelo: el fútbol diplomático. Juntos irán el jueves a la mañana a la Bombonera, en La Boca. El fútbol ayudará los presidentes a flexibilizar la rigidez de la visita de Estado. Hollande llegará acompañado de David Trezeguet, el futbolista franco argentino, ex miembro de la selección francesa y que finalizó su carrera en River, que acaba de presentar su biografía. El plantel de Boca y otros jugadores que pasaron por Francia se reunirán a saludarlo.

Pero no será el único encuentro. Hollande decidió llevar a Buenos Aires a sus argentinos en París, a los que triunfaron en Francia y ayudaron a construir una sofisticada relación cultural entre ambos países. En el avión presidencial francés aterrizarán en Buenos Aires y serán parte de su delegación el director y actor teatral Alfredo Arias, el chef Mauro Colagreco, el músico y productor del Gotan Project Eduardo Makaroff y el pintor Antonio Seguí.

Después de la revista de tropas en la Plaza San Martin, Hollande y el presidente Macri se encontrarán en la Casa de Gobierno para su entrevista oficial, la firma del acuerdo bilateral y una conferencia de prensa conjunta. Una buena noticia. El presidente Francois Hollande es famoso por su irrefrenable sentido del humor y tiene una excelente relación con los periodistas.

El presidente viaja acompañado por 30 empresarios franceses. Se encontrará en el Hotel Four Seasons con los jefes de empresas franceses en la Argentina. Una comida de Estado se celebrará en el Museo del Bicentenario con discursos de los dos líderes. Argentina perdió en esta ocasión la posibilidad de mostrar a Hollande y su delegación la influencia francesa en la Argentina, en los fantásticos salones del Palacio San Martín.

A las 8:15 del jueves, el presidente Hollande recorrerá a pie el Parque de la Memoria. Allí se encontrará con Estela de Carlotto, titular de las Abuelas de Plaza de Mayo, y las Madres de Línea Fundadora. Hebe de Bonafini no estará presente en el encuentro, después de haber acusado a Macri de “dictador”.

Hollande arrojará flores en el río de la Plata en homenaje a las monjas francesas secuestradas y asesinadas junto a otros franceses desaparecidos y a las victimas de la dictadura militar en Argentina. Estará junto a él y Carlotto, el jefe de gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta.

Como no habrá demasiado tiempo para una milonga en esta agenda cerrada, un septeto de científicas tangueras lo esperarán en el Polo Científico y Tecnológico.La colaboración tecnológica y científica en el sector espacial, y de salud es intensa. Ha habido 350 acuerdos de cooperación en este terreno. Allí estará el ministro Lino Barañao y el de Educación, Esteban Bullrich. Se proyectan reforzar los intercambios de estudiantes y jóvenes entre ambos países duplicando el numero de voluntarios internacionales en empresas de Argentina de 60 a 120 e incrementar el numero de visas por “vacaciones y trabajo” en Francia de 500 a 700 y luego a 1000 de aquí a cinco años.

Tras su paso por la Bombonera y un reencuentro con personalidades del mundo cultural, el presidente Hollande almorzará con empresarios y economistas argentinos en la embajada de Francia, y hará un discurso. Se despedirá de Argentina y de la comunidad francesa desde el Liceo francés Jean Mermoz, el mismo donde Antonia Macri comenzará su jardín de infantes, donde lanzará las obras de ampliación del prestigioso colegio franco argentino. Será el primer resultado de esta breve pero productiva visita.