sábado, 12 de octubre de 2013

GRAVÍSIMO HORIZONTE




12/10/2013

 Cuando se habla de un dólar a $11... y hay que importar petróleo

La pérdida de reservas complica la gestión de la base monetaria al punto tal que el descenso del ritmo de expansión monetaria no es resultado de una prudencia del Banco Central, que sigue emitiendo para financiar el Fisco, sino de que el Banco Central no encuentra dólares disponibles para comprar (procedimiento que envía pesos al mercado porque el BCRA paga con pesos). Una economía con menos dólares, tiene mayores necesidades de importación de un insumo esencial: energía. Por un pedido de las petroleras, ya se analizan alternativas para autorizar importaciones de petróleo, algo que no sucede en forma significativa en décadas. Una situación es incompatible con la otra. 
 
  "El descenso creciente de las reservas es consecuencia, principalmente, del pago de deuda pública con reservas (fondo de desendeudamiento) y de la salida neta de divisas por las cuentas cambiarias de turismo, energía e industria de los primeros 3 trimestres. 
 
Para el último trimestre se proyecta una menor demanda de dólares para servicios de deuda pública (restan US$ 1.800 millones) e importaciones energéticas, pero ello no sería suficiente para revertir la actual pérdida de reservas."
 
 
CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24). Es muy grave el rumbo de la política económica. La situación avanza hacia una crisis importante, y hoy día nada puede ya hacer la Administración Cristina para impedir, por ejemplo, una devaluación mayor del peso. En este escenario, ya se habla de un tipo de cambio de cobertura de $12, dólar paralelo podría cotizar entre $11.3 y $13.1 a fin de año y/o comienzos de 2014. Aquí 2 lecturas que explican la situación: por un lado, la escasez de dólares; por el otro, la necesidad de más importaciones (en este caso, de petróleo crudo).
 
Lectura N°1: Economía & Regiones
 
En el último mes, la emisión de base monetaria alcanzó un 26% respecto al mismo mes del año pasado, lo que implicaría una expansión en términos reales de sólo el 0.6% anual1. Hace un año atrás la base monetaria crecía a un ritmo interanual del 37% en términos nominales y al 14% en términos reales.
 
El actual descenso del ritmo de expansión monetaria no constituiría un viraje hacia una mayor prudencia monetaria. En palabras coloquiales, la base monetaria crece menos pero no por una decisión del BCRA, sino porque no hay dólares para comprar y emitir pesos a cambio.
 
Es más, en contra de la voluntad del Central, la pérdida de reservas funciona como un mecanismo no deseado de absorción monetaria, por el cual la autoridad monetaria no paga tasa de interés pero deja de ganar utilidades por diferencia de cambio o tasa.
 
La actual expansión de la base monetaria es consecuencia principalmente de la emisión para financiar al Fisco, que se ha convertido en el canal fundamental de inyección de liquidez. De hecho, puede observarse que en los últimos 30 días el BCRA tuvo que emitir un poco más de $19.000 millones para financiar al Tesoro. Dicha emisión fue compensada en parte por una venta de dólares por -$7.500 millones y una colocación de títulos de -$3.500 millones, lo cual terminó generando una expansión de base $8.000 millones. En resumen, hoy en día la base se expande por el Tesoro y se contrae en mayor medida por la pérdida de reservas y en menor proporción por la colocación de letras.
 
Considerando que las necesidades de financiamiento del sector público crecerían (por estacionalidad) en estos próximos 3 meses, habría que esperar que la expansión de base monetaria volviera a acelerarse ya que la monetización de los déficits más que compensaría la falta de emisión para comprar dólares.
 
Además, el estudio de la relación instrumentos de absorción / base monetaria pone en evidencia que en el BCRA no hay vocación de prudencia monetaria. Si hubiera vocación en pos de una mayor prudencia monetaria, el ratio Letras + pases en relación a la base monetaria debería incrementarse a lo largo del tiempo, mostrando un aumento de la relación entre lo que se absorbe y se emite de pesos. En nuestra economía sucede exactamente lo opuesto.

No hay comentarios:

Publicar un comentario