Aliverti da vergüenza ajena.
En su sabatino programa radial, el Sr. Eduardo Aliverti, dejando al periodista de lado y asumiendo claramente el papel de militante, con la soberbia que lo caracteriza se dedica denodadamente, aunque sin éxito, a criticar cualquier medida de quien no comulgue con el “exitoso modelo de inserción”.
Pero no se crea que se trata de críticas medulares, basadas en estadísticas serias, experiencias comprobadas, cálculos de probabilidades u opiniones de reconocidos peritos en cada materia. Nada de eso, con sofismas dignos de Jardín de Infantes, intenta ridiculizar a los supuestos “oligarcas” que se atreven a criticar el modelo, a proyectar obras públicas por fuera del régimen, o simplemente a mencionar lo que llegarían a modificar en caso de estar en determinada posición.
Justamente, en su último programa, con su inveterada petulancia y pose de intelectual progresista se permitió burlarse y criticar sin piedad y sin argumentos la opinión del Sr. Jefe de Gobierno porteño por sus declaraciones en el sentido de que él modificaría el programa “Futbol para todos”, fundamentalmente en lo que se refiere a la financiación estatal.
Y para justificar sus denuestos apeló al sentimentaloide argumento de que Macri, como “buen oligarca” quiere Fútbol para pocos porque a “ellos” les molesta estar cerca de los pobres y que por eso aumentó el subte para que sólo viajen los que tienen plata. (¿Patético, no?)
Sr. Aliverti, su conmovedora defensa de los desposeídos resulta un mamarracho falto de sentido y sobreactuado. Sepa Ud. que el fútbol podrá seguir siendo visto por todos, lo que Ud. no comprende, aparentemente, es que la crítica – compartida por la gran mayoría del pueblo argentino – recae exclusivamente en el hecho de ser solventado en su totalidad por el estado en la desesperada y monopólica campaña propagandística del gobierno.
El mismo programa podría ser sostenido por anunciadores privados, con lo cual no sólo el erario público ahorraría miles de millones de pesos que podrían utilizarse para otros fines más honestos y menos demagógicos, sino que la ciudadanía disfrutaría aun más cada partido al no tener que soportar tediosos anuncios de obras que se inauguran varias veces, varias veces se paralizan y varias veces vuelven a inaugurarse.
Y me llama la atención que Ud. despotrique contra quienes supone que por pensar diferente somos “oligarcas” o “fachos” o “desestabilizadores”… no somos más que argentinos que simplemente tenemos opinión independiente, aunque a Ud. le resulte imposible imaginar independencia de opinión. También resulta llamativo el hecho de que Ud. se pliegue ante el poder tornándose en un heraldo de los actos del príncipe, dejando la actividad periodística en el arcón de los recuerdos.
¿No sabe Sr. Aliverti que el gobierno que Ud. alaba paga su tediosa propaganda en Futbol y Automovilismo para todos y todas con la plata de los jubilados? ¿No sabe que la dama que Ud. endiosa es la misma que no hesitó en firmar el veto a la ley del congreso que aprobaba el 82% móvil de los jubilados? ¿Ignora acaso que la misma señora que declaró su sacro amor por los árboles llegando a ofrecer su vida a cambio de un solo jacarandá, es la misma que se niega a cumplir con la ley 26331 de Bosques Nacionales no girando los fondos correspondientes, contribuyendo así a que sólo en el pasado año 2012 hayan desaparecido 40 millones de árboles? ¿Escuchó Ud. a la Sra. Presidente referirse a esta tremenda masacre forestal?
Finalmente, Sr. Aliverti, ¿En qué lugar ubicaría Ud. a tantos militantes camporistas y funcionarios gubernamentales que han declarado a Puerto Madero como su lugar en el mundo o que poseen mansiones en el exterior para su merecido descanso? ¿Son también “oligarcas” o “fachos”?
Sr. Aliverti, en su sobreactuada crítica resulta Ud. patético.
Autor: Juan Manuel Otero
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20/02/2013
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