Las nuevas manifestaciones de la crisis de seguridad -por ejemplo los
linchamientos de motochorros- contribuyeron a recalentar la interna en
el PJ bonaerense. Al menos dos encuestadores le habrían hecho llegar a
Daniel Scioli encuestas donde su imagen positiva bajaría por su falta de
diferenciación de la Casa Rosada. El tema fue aprovechado por algunos
de los principales operadores sciolistas -entre ellos Eduardo Camaño-
para presionar al gobernador con un tema central. Numerosos intendentes y
legisladores le estarían reclamando al ex motonauta que habilite el
armado de una estructura política territorial paralela al Frente de la
Victoria. El objetivo sería presionar al kirchnerismo y prepararse para
el caso de que el cristinismo entre en una crisis terminal, situación
que la evolución de la economía no parece indicar.
Sin embargo, Scioli se mantendría imperturbable cuidándose de no avalar, ni siquiera indirectamente, un armado paralelo al FpV. Esta actitud privilegiaría la idea de no irritar en lo más mínimo a la presidente, cuyas señales políticas están desconcertando a propios y extraños. CFK no sólo impulsa al entrerriano Sergio Urribarri a que consolide su rol de precandidato a presidente sino que estaría alentando al salteño Juan Manuel Urtubey a que también entre oficialmente en la carrera presidencial.
Obviamente, el más perjudicado por la eventual multiplicación de candidatos es Scioli, que vería cómo se debilita su sueño de ser el candidato natural del peronismo. En este esquema de extrema prudencia juega en lo inmediato la incógnita de cómo conformará el cristinismo la nueva mesa de conducción del PJ nacional, que renovaría sus autoridades en los próximos tres meses. Después de la muerte de Néstor Kirchner, Scioli quedó a cargo de la presidencia del Consejo Nacional del PJ, es decir que cualquier ubicación que lo colocara por debajo de la vicepresidencia primera sería leída como una devaluación de su figura.
Ahora, el escándalo que desató en Córdoba la investigación en torno a la financiera CBI S.A. crece a medida que se desnudan nuevos vínculos con el poder político. En los últimos días se puso en duda la continuidad del juez que entiende en la causa, Ricardo Bustos Fierro, quien debió soportar un pedido de apartamiento por parte del fiscal Enrique Senestrari luego de que se conoció una foto de diciembre de 2001, donde se lo ve abrazado a Euclides “Tati” Bugliotti, en una fiesta de fin de año de la revista Punto a Punto. En la carta atribuida al vicepresidente de CBI, Jorge Suau, que llegó hasta la Justicia Federal luego de ser encontrado muerto en su camioneta, le dedica un importante párrafo a Red Bus, sistema de pago del transporte cordobés, y a Siemens.
“La monetización de cheques en negro supera los dos millones de pesos diarios, llegó a ser cercana a los 5 millones en la época Red Bus estando comprometido en esto la Municipalidad de Córdoba, con las gestiones del anterior intendente Giacomino, y el actual (Ramón) Mestre “, asegura Suau en la misiva. La comuna está ahora en manos del radicalismo. Pero Suau había sido funcionario de la administración de José Manuel de la Sota. Acosado ahora por éstas y otras señales de desgaste político, el mandatario estaría a la búsqueda de un paraguas político nacional que atenúe su tendencia a la baja.
Sin embargo, Scioli se mantendría imperturbable cuidándose de no avalar, ni siquiera indirectamente, un armado paralelo al FpV. Esta actitud privilegiaría la idea de no irritar en lo más mínimo a la presidente, cuyas señales políticas están desconcertando a propios y extraños. CFK no sólo impulsa al entrerriano Sergio Urribarri a que consolide su rol de precandidato a presidente sino que estaría alentando al salteño Juan Manuel Urtubey a que también entre oficialmente en la carrera presidencial.
Obviamente, el más perjudicado por la eventual multiplicación de candidatos es Scioli, que vería cómo se debilita su sueño de ser el candidato natural del peronismo. En este esquema de extrema prudencia juega en lo inmediato la incógnita de cómo conformará el cristinismo la nueva mesa de conducción del PJ nacional, que renovaría sus autoridades en los próximos tres meses. Después de la muerte de Néstor Kirchner, Scioli quedó a cargo de la presidencia del Consejo Nacional del PJ, es decir que cualquier ubicación que lo colocara por debajo de la vicepresidencia primera sería leída como una devaluación de su figura.
De La Sota avanza sobre Massa
A todo esto, uno de los pocos movimientos que se registró en los últimos días en la interna peronista fue el rápido acercamiento de José Manuel de la Sota a Sergio Massa, aparentemente con la finalidad de ir pensando en convertirse en su compañero de fórmula. Ex aliado de Scioli, el cordobés viene jaqueado por una sucesión de escándalos que deterioran su gestión. La secuencia empezó con el descubrimiento de fuertes nexos entre la policía local y grupos de narcotraficantes.
Ahora, el escándalo que desató en Córdoba la investigación en torno a la financiera CBI S.A. crece a medida que se desnudan nuevos vínculos con el poder político. En los últimos días se puso en duda la continuidad del juez que entiende en la causa, Ricardo Bustos Fierro, quien debió soportar un pedido de apartamiento por parte del fiscal Enrique Senestrari luego de que se conoció una foto de diciembre de 2001, donde se lo ve abrazado a Euclides “Tati” Bugliotti, en una fiesta de fin de año de la revista Punto a Punto. En la carta atribuida al vicepresidente de CBI, Jorge Suau, que llegó hasta la Justicia Federal luego de ser encontrado muerto en su camioneta, le dedica un importante párrafo a Red Bus, sistema de pago del transporte cordobés, y a Siemens.
“La monetización de cheques en negro supera los dos millones de pesos diarios, llegó a ser cercana a los 5 millones en la época Red Bus estando comprometido en esto la Municipalidad de Córdoba, con las gestiones del anterior intendente Giacomino, y el actual (Ramón) Mestre “, asegura Suau en la misiva. La comuna está ahora en manos del radicalismo. Pero Suau había sido funcionario de la administración de José Manuel de la Sota. Acosado ahora por éstas y otras señales de desgaste político, el mandatario estaría a la búsqueda de un paraguas político nacional que atenúe su tendencia a la baja.


No hay comentarios:
Publicar un comentario