CARTAS Y NOTAS DE NUESTROS AMIGOS LECTORES
Amigos:
Los periodistas, a quienes inexorablemente, en algún momento del día, escuchamos, vemos o leemos, piden un plan de gobierno efectivo, para mutilar la escalada criminal.
Nada aportan como posibles soluciones, salvo esa bovina y destemplada declamación.
Para colmo, algunos, en su mayoría invertidos, hacen suyas las arengas de esta descerebrada Presidente, que atribuye a la pobreza, la exclusión y la marginación social, las cimientes de la potencialidad del delito.
Si eso fuese mínimamente cierto, esto es, que la fractura de la Ley, obedece a la imposibilidad de sustento alimentario, esta ola demencial, estaría circunscripta a lo que en el Derecho Penal, se conoce como "hurto famélico".
Y las victimas serian, los escaparates de supermercados y negocios expendedores de comidas.
Que además carecería de connotaciones violentas.
Pero estos desalmados, por lo general no circulan de a pie, de allí el mote de "motochorros".
Y quien tiene los medios para costearse un vehículo de dos ruedas, no esta en procura de satisfacer su apetito, sino de otros valores mas tangibles como relojes, celulares, dinero y todo otro objeto de valor, para poder comercializarlo de inmediato, en el mercado clandestino de los "reducidores".
Que a su vez, retroalimentan el hampa revendiendo todo lo robado.
Otro tanto se debe señalar acerca de los "pungas", en las calles, subtes, trenes y colectivos.
Porque salvo que alguien me indique lo contrario, no he tenido noticias de algún "descuidismo" y/o "arrebato" para que el autor
se hiciera de un pedazo de pan o algún otro comestible.
Y para culminar esta trilogía de modalidad delictiva, esta la vestimenta de estos cacos.
Ninguno de estos, como lo acreditan las cámaras de seguridad y las decenas de miles de testimonios, dan cuenta que la condición de vestuario de estas resacas sociales, son harapientas.
Por el contrario, todos sin excepción están ataviados con ropa deportiva y zapatillas de valores promedio de mercado.
Y finalmente, en una categoría especial, encontramos a los asaltantes de autos que las mas de las veces, ultiman simplemente a los automovilistas, que resignados al desapoderamiento de sus automóviles ni siquiera atinan a defenderse.
No Amigos; esta ola criminal es el producido de otras causas que en nada se asemejan a una división de Clases, como reitero, lo pregona esta Golfa del Ejecutivo.
Es el resultado de la vagancia que añadida al consumo de enervantes, a una legislación disolvente, a jueces que embanderados del lenocinio garantista de Zaffaroni y a la concupiscencia policial por los cientos de millones de dólares que les reporta su participación en el mercadeo de estupefacientes, son los elementos requirentes para que esto se multiplique hacia el infinito.
Frente a esta pandemia en progreso, creo que dos simples medidas de gobierno que esta meretriz jamás habrá de implementar, la menguarían este flagelo que se atenuaría, creo que bastante.
La primera, debería ser, como ya lo he resaltado hasta el hartazgo antes de ahora, que todas las policías, incluso la Federal y por cierto los "guardias calesiteros" de la Metropolitana de Macri, pasaran automáticamente a la jurisdicción de la Gendarmería Nacional.
Única Fuerza probada en el adecuado manejo de conflictos a gran escala.
Y la segunda, una vez gendarmerizadas todas las Fuerzas de Seguridad, reimplantar los "Edictos Policiales", que funcionaron con eficiencia durante ochenta años, y que facultarían al Comandante Zonal, a privar de la libertad por treinta días, a quienes
no acreditaran fehacientemente un modo de vida honesto.
Con la cantidad de patrulleros que actualmente se utilizan, para que llegue sin enfriarse la pizza al Comisario y estableciéndose cuadriculas en serio, no hipotéticas como lo son en la actualidad, dos motoqueros que no fueran empleados que no tuviesen un empleo conocido, automáticamente y simplemente, desaparecerían de las calles que actualmente asolan a voluntad.
Con tales elementos "disuasivos", después tendríamos el suficiente tiempo para ir por esos jueces que se deleitan con la soltura
de los que ellos denominan junto a esta Aldonza toloseña, como los "prisioneros del sistema".
No son necesarias las "comisiones parlamentarias" de estos perdularios legisladores, para encontrar una solución.
Porque ya nos han ofrendado acabadas muestras de lo que son capaces, al haber formulado un anteproyecto de Código Penal,
mediante el cual se morigeran las penas para ciento cuarenta y siete injustos.
Si actualmente, esta "selva" es intoxicante, por el "mecanismo giratorio" del robe y salga, imagínense lo que seria luego de esta reforma aprobada.
Tal vez, estas modificaciones, que habrán de expurgar la indefensión ciudadana, sea tarea para otra clase de Gobierno.
Que no emerja de venideras elecciones fútiles, porque gane quien sea, ninguno de los que se impongan, se animaran a que una concentración de fuerza, este depositada en nuestra Gendarmería.
Porque todos repudian el color verde de sus uniformes.
Ya que les recuerda otra época, en la que tenían que ganarse el pan con el pan con el sudor de su frente.
No como ahora que lo hacen a expensas de todos nosotros, los Contribuyentes.
Estas pautas, simples de implementar, tornarían en efectiva
LA GENDARMERIZACION CONTRA EL DELITO.
Cordialmente Carlos Belgrano.-
No hay comentarios:
Publicar un comentario