07/03/14
Las ventas de motovehículos cayeron abruptamente en 2014 y el sector se declaró en “estado de emergencia”. La devaluación impactó en el comercio y miles de puestos de trabajo están en peligro. Piden soluciones urgentes .
"Es notable ver en las provincias del norte, en todo el NEA y el NOA, la cantidad de gente que va en moto. Una moto cada 64 personas y nos ha convertido en líder en la región”. La frase pertenece a la presidenta Cristina Kirchner y fue pronunciada el sábado pasado en la Asamblea legislativa.
La realidad no tardó en desmentir los dichos de la presidenta, que el fin de semana estuvo acompañada por el motoquero Amado Boudou. Concretamente, la Asociación Argentina de Motovehículos (Mottos) reclamaron al gobierno nacional una solución inmediata a la crisis del sector anteun estado de “emergencia” que hace peligrar los puestos de miles de trabajadores.
Ayer se conoció que luego de que se vendieran 750 mil motos durante 2013 en todo el país, durante enero y febrero se revirtió la tendencia y en el último mes se patentaron apenas 41.144 unidades, un 27% menos que el mismo período del año pasado, con una caída diaria del 38%.
En este contexto, la entidad, que agrupa a 440 concesionarias, envió una carta formal a la ministra de Industria, Debora Giorgi, en la que se determina la "emergencia económica del sector", y donde se pide que se convoque a una "jornada de trabajo y debate con todos los actores de la cadena de valor", convocando también a la Secretaría de Comercio, a cargo de Augusto Costa.
La tendencia descendente, estiman desde Mottos, se agravará con el correr de los meses, pues el acumulado del 2014 hasta ahora alcanzó las 119.679 unidades, implicando un descenso del 7% comparado con el acumulado de 2013, en el que se habían patentado 128.751 unidades. "Tenemos unas 100.000 motos en stock para tres meses comerciales. Es un nivel normal, pero el problema es que los concesionarios no están reponiendo lo que venden", dijo Diego Dinitz, presidente de Mottos, quien agregó que de cada 10 unidades que el concesionario comercializa, "sólo se reponen tres porque el producto de su venta lo necesita para cubrir el descalce financiero por las condiciones comerciales que definieron las terminales".
Entre los factores que encuentra la asociación para la abrupta caída, y que detalla en la carta, están la suba de precios tras la devaluación, pues "produjo un impacto en las listas de febrero del 30 al 40%".
Finalmente, el cambio en las condiciones comerciales de terminales a concesionarios fue otro de los problemas que el sector presentó al gobierno nacional. Los plazos de pagos antes se estimaban entre 60 y 120 días, pero ahora las terminales prefieren el "contado anticipado" para entregar las motos. A su vez, denunciaron que hay compras realizadas y pagadas por la primera quincena de enero que fueron canceladas por las terminales.
Se caen las exportaciones a Brasil
La relación comercial con el mayor socio de la región sigue teniendo un balance negativo, algo constante durante la gestión K pero que se ha pronunciado incluso luego de la devaluación. Factores como las limitaciones a las compras y el aumento de los costos internos fueron factores claves para sostener un saldo deficitario.
Según un reciente informe de la consultora Abeceb, "las exportaciones se redujeron a u$s1.094 millones, por menores ventas de gas, trigo, naftas, autopartes y vehículos que motivaron tal resultado, y las importaciones bajaron a u$s1.165 millones. Los productos que más cayeron fueron petróleo, semimanufacturados de hierro o acero, calzados, óxido de aluminio y vehículos".
Por eso, el resultado del intercambio comercial bilateral fue deficitario en u$s71 millones para la Argentina, en contraste con el superávit de u$s139 millones que se registró en febrero de 2013. La situación es grave, pero las perspectivas a futuro son aún más críticas. En los primeros 2 meses de 2014 el comercio entre la Argentina y Brasil acumuló una caída interanual de 16,9%, con una contracción de las exportaciones de 23,3% y de las importaciones de 11,8% y un rojo de u$s297 millones. Un año antes, en ese período se había alcanzado un excedente minúsculo de 16 millones de dólares.
El mercado laboral, estancado
Según un relevamiento oficial, sólo el 32,8% de las empresas argentinas buscó personal en el último trimestre de 2013, cifra por demás baja si se compara con las estadísticas generales pues fue la menor proporción desde 2011, pero que generan preocupación porque fueron publicadas por el Indec, con la consecuente desconfianza que esto conlleva.
Además, la comparación del Informe oficial de Demanda Laboral Insatisfecha en la Argentina con los precedentes para el último cuarto del año permitió detectar que la proporción de empresas que buscó personal fue la segunda más baja desde 2006: se ubicó en un rango intermedio entre los niveles de 2009 y 2010, cuando el país, como gran parte de la región había acusado los embates de la crisis financiera internacional.
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