21 de Febrero del año 2014 - 1227
Me parece importante agregar al artículo de ayer
sobre el drama de Venezuela algunas palabras más para destacar la inmensa
gravedad de la traición de Henrique Capriles Radonski, candidato opositor en
las elecciones presidenciales de Abril del 2013.
Según los cómputos oficiales, las ganó Maduro por un 1,5% de los votos. Obviamente se habían cometido todas las formas posibles de fraude desde el gobierno "bolivariano", pero el más efectivo, como en todas las ocasiones anteriores, fue el fraude electrónico, es decir, el cómputo efectuado mediante un programa preparado por empresas de informática que se ocupan de hacer que el resultado sea el que quiera quien las contrata. Esas empresas son INDRA y STARMATIC. Debe haber otras, pero una de estas dos es la que falsea las elecciones venezolanas. La verdad es que el pueblo, sin saber quién era en realidad Capriles, lo votó mayoritariamente en Octubre del 2012 cuando el candidato era el propio Chavez y según los cómputos imparciales efectuados en ese entonces, el resultado fue: TOTAL GENERAL DE VENEZUELA: Chavez 31%- Capriles 56%. El detalle de los resultados, Estado por Estado, puede verse en el nro.1133 de este periódico. Pero la Autoridad Electoral le dio el triunfo a Chavez. Capriles no reclamó ni permitió que sus partidarios reclamaran contra esta monumental estafa. En el nro. 1137 publiqué un emotivo relato de un grupo de estudiantes que trabajaron en el control de las votaciones y cuando todo demostraba el triunfo del opositor, recibieron la orden (desde el comité de Capriles) de cesar en sus trabajos y cerrar sus computadoras. Vale la pena leerlo porque allí se ve la decepción dolida de esos jóvenes que veían clausurado su futuro por la traición de su propio candidato. Muerto Chavez en Marzo del 2013, se realiza una nueva elección presidencial en la que el candidato chavista era Maduro y Capriles nuevamente el opositor. En esta elección las posibilidades de triunfo de Capriles eran todavía mayores que contra Chavez. Sin embargo, como dije más arriba, la tiranía venezolana pretendió que Maduro había ganado por el estrecho margen del 1,5% de los votos. En realidad, las ganó Capriles pero con una rapidez inaudita éste se apresuró a reconocer la "victoria" de Maduro y se negó a revisar la legitimidad de los cómputos, siendo que todos los antecedentes hacían vehemente la sospecha del fraude. SI EN ESE MOMENTO Capriles hubiera convocado a la resistencia, en nombre de la autenticidad del sufragio, todas las posibilidades de victoria estaban de su lado, aunque a costa de muchos muertos. El mundo "democrático" no hubiera podido hacerse el distraído como lo hace ahora, ya que se trataba de un escamoteo ilícito de la voluntad popular que, supuestamente es la única fuente de legitimidad de un gobierno republicano. Y las FFAA no hubieran podido apoyar con sus armas el robo de la elección. Pero Capriles traicionó. Y aceptó como legítimo lo que era notoriamente ilegítimo: la elección de Maduro. Desde ese momento, todas las protestas y todos los sacrificios del valiente pueblo venezolano pueden ser presentados como un alzamiento contra la "democracia" y Maduro pudo desde Abril del 2013 aumentar el poder y el soborno de los militares, el número y el armamento de sus fuerzas irregulares y la impune criminalidad de sus fuerzas de choque, "los colectivos". Capriles sigue decidido a no objetar el fraude. Y el nuevo líder que ha surgido, Leopoldo Lopez, socialista él también, se ha entregado preso inexplicablemente, dejando nuevamente a los venezolanos librados a su suerte. Como era de esperar, los jueces de la tiranía ya lo han procesado y puesto preso. Entretanto, según noticias de hoy, los asesinos del gobierno ya no atacan manifestaciones callejeras sino que persiguen individualmente a quienes saben que son opositores decididos. Este comentario adicional sobre el drama de Venezuela era necesario para que nos demos cuenta que o bien nos ponemos en serio a entender la situación política de nuestros países, sin aceptar las mentiras de los tiranos instalados en el poder y a pensar inteligentemente como organizar la resistencia, sin falsos líderes, o nuestro futuro estará dominado por el comunismo. Cosme Beccar Varela |
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La presente nota del Dr. Cosme Beccar Varela, es publicada en La Misère Porc, por gentileza de su autor.
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