LAS FUERZAS ARMADAS NO REPRIMIRAN AL PUEBLO ARGENTINO

Compatriotas  Civiles y Militares:

Desde hace 24 horas, el JEMGE Milani, mantiene constantes reuniones con el Jefe de Gabinete Capitanich, en las que entre ambos evalúan la posibilidad de incorporar a la Fuerza Ejercito, en eventuales incidentes de represión al Pueblo de la Nación Argentina.

Esta modalidad en la que se pretende involucrarnos, por la saturación físico/psicológica de nuestros Camaradas de Gendarmería Nacional y Prefectura Naval, de acuerdo a las consultas que realizamos desde anoche a todas nuestras Unidades y a algunas de la Armada, será masivamente desobedecida.

Toda vez, que no serán las Fuerzas Armadas, vilipendiadas nutridamente desde el advenimiento de la democracia, las que le salvaran la ropa a este gobierno mafioso y antipatriótico, que ya cuenta con una ruta de escape programada cuando todo esto estalle.

Intervendremos cuando la convivencia social se fracture a limites, que todavía no advertimos como inminentes, por ese absurdo sesgo reverencial que aun gobierna al Ciudadano común.

Y cuando la conciencia colectiva, entienda de una vez por todas, que las herramientas que provee el aparato gubernamental, solo alimentan el caos y la desolación.

Contemporáneamente a que tales eventos se materialicen, recién entonces, ungiremos internamente a un General de División en actividad, y falta de uno con el espíritu de Mando requirente, a otro en situación de retiro, para que se haga cargo de nuestra Jefatura de Estado Mayor y seguiremos sus directivas disciplinadamente.

Nuestro Generalato, salvo algunas excepciones, esta maniobrando como un cuerpo estrecho y cómplice de las artimañas oficialistas.

Por lo que no lo reconocemos como la cabeza de nuestra Institución.

Nos mantenemos vigiles, sobre los acontecimientos por venir, que conforme  nuestros analistas, mucho se habrán de deteriorar, no por los saqueos, aunque estos se produjeran masivamente, sino por el descontrol monetario e hiperinflacionario, que estos remiendos salariales a las Fuerzas de Seguridad, y potencialmente a todos los empleados estatales, le irrogaran al Erario Publico.

Estamos y estaremos siempre al lado de todos los Argentinos, como guardianes de la Seguridad interior y exterior de la Patria.

Por cuanto consideramos que somos la ultima línea de defensa del patrimonio de toda la Argentinidad.

Pero no haremos ningún movimiento, fuera de las Guarniciones, de no contar primero con una cierta e inequívoca expresión popular en tal sentido.

En aguardo que esta vez, sea la voz de la Argentinidad univoca, la que solicite nuestra intervención directa.

A la que también se deberá incorporar, la masa periodística, amonedada y aferrada aviesamente a esta abyecta línea presidencial.

No reiteraremos los errores del 24 de marzo de 1976, cuando los cantos de sirena de este malandraje político, rogo por nuestra intervención, para que luego, cuando confortablemente, comenzaron a percibir copiosamente los beneficios económicos de este agotado sistema, nos tildaban de represores y al gobierno del Proceso de Reorganización Nacional, como una sangrienta dictadura.

Nuestros encarcelados Mayores, se están pudriendo en las cárceles, sin pruebas legitimas acusatorias, y sometidos a mas sevicia que los delincuentes comunes, quienes tuvieron un juicio y se acredito la materialidad de sus crímenes.

Pues bien, nosotros por formación, no les pagaremos a estos disolventes del gobierno con la misma moneda ni con el reverso de ella.

No será menester, ya que los someteremos a un enjuiciamiento legal, porque contamos en nuestros archivos, con todas las pruebas de cargo de sus desfalcos a la Administración Publica y la intelectualidad de todos los homicidios perpetrados por sus agentes.

Por todo lo apuntado, les reiteramos que estamos sometidos a la voluntad mayoritaria y expresionista de nuestros Compatriotas.

Cuando advirtamos, prontamente creemos, que las anomias populares, predominen por sobre la suerte de nuestra Patria, captaremos el mensaje que

nuestra intervención directa, no admitirá mas debate.

Ya que deberemos de privilegiar el auxilio que la propia Constitución Nacional, nos otorga cuando la Nación se encuentre a la deriva.

    Cnel. 089, Cnel. 014,